Nuestras redes sociales están inundadas de imágenes de playas brillantes con palmeras increíblemente perfectas y aguas de un azul profundo. Pero incluso ir a la playa con la cámara encendida puede ser arriesgado: la arena invade lugares que nunca creíste posibles, y la mayoría de los modelos no sobrevivirán a un chapuzón rápido en el océano.
Es posible que ya tenga una cámara resistente al agua. Los últimos teléfonos iPhone y Android de gama alta están certificados por IP para una inmersión breve. Y el auge de los teléfonos inteligentes de alta calidad ha reducido en gran medida la cantidad de apuntar y disparar dedicados en el mercado. Pero incluso si solo desea darse un chapuzón rápido y tomarse una selfie, existen razones para no llevar su costoso teléfono al agua.
Si lo pierde, habrá perdido todos los datos que contiene. Es particularmente riesgoso para los viajeros, ya que los documentos como las tarjetas de embarque y las confirmaciones de hoteles a menudo se almacenan en su teléfono inteligente. Y no olvidemos cuánto cuesta un teléfono nuevo.
Entonces, la respuesta es conseguir una cámara resistente al agua. Algo que no cuesta tanto, así que si algo sale mal, no es el fin del mundo. Muchas cámaras a prueba de agua también son robustas para que puedan soportar caídas.
Siga leyendo para conocer nuestras principales recomendaciones. Probamos la mayoría de ellos con algunas excepciones. Tomamos la decisión de agregar una cámara de película de 35 mm desechable a la lista por diversión, aunque si sigue ese camino, debe asegurarse de que puede revelar la película. La mayoría de las farmacias han cerrado sus minlabs a color.
También vale la pena considerar las carcasas submarinas si ya tiene una cámara SLR o sin espejo de alta calidad. No hemos probado ninguna, pero marcas como Aquatica, Ikelite, Nauticam y Sea & Sea se han ganado una sólida reputación y venden carcasas para muchas cámaras populares.
